Hoy, 26 de julio, se cumple una efeméride muy importante para Puerto de la Cruz. Tal día como hoy -pero en 1956-, el Gobierno de Franco, a través del Ministerio de la Gobernación, acordaba otorgar al municipio el título de ‘Ciudad’ y el tratamiento de ‘Excelentísimo’ al Ayuntamiento portuense.

Como era preceptivo, el paso inicial lo dio el propio pleno de la corporación municipal, presidido por su Alcalde Isidoro Luz Cárpenter (*), quien solicitó dicha declaración basando su petición “en el prestigio alcanzado desde el punto de vista cultural, urbanístico, económico, demográfico, social y turístico, que le han convertido en uno de los más importantes núcleos del archipiélago canario”.
El expediente fue tramitado y aprobado por el Ministerio de la Gobernación, del que era titular Blas Pérez González, contándose con un dictamen favorable -que era preceptivo-, de la Real Academia de la Historia.
El reconocimiento del Puerto de la Cruz como ciudad y al Ayuntamiento con la consideración protocolaria del más alto nivel como es ‘Excelentísimo’, tienen en la época una relevancia destacada y supone un aldabonazo significativo en el contexto del crecimiento que empezaba a experimentar la ciudad y que se incrementaría en las décadas posteriores con la llegada del llamado turismo de masas y que situó al Puerto de la Cruz en una tendencia continua de crecimiento económico y expansión urbanística.
Así pues hoy Puerto de la Cruz cumple años como ciudad que es, algo de lo que a buen seguro nos sentimos orgullosos todos los portuenses, aunque en estos tiempos del siglo XXI que corren ya lo veamos como algo normal.

(*) Isidoro Luz Cárpenter, quien también fue presidente del Cabildo de Tenerife, fue alcalde de 1927 a 1931, de 1934 a 1936 y de 1944 a 1963.