El pasado día 5 de febrero sobre las 21:30 horas, y cuando se encontraba en horario libre de servicio practicando deporte en un gimnasio del Puerto de la Cruz, se percató que un hombre, de 39 años de edad, usuario del mismo gimnasio, sufrió un ataque cardiaco fulminante mientras se encontraba utilizando una cinta de correr. Ante lo sucedido asistió a la víctima siguiendo los protocolos básicos de primeros auxilios aprendidos durante su periodo formativo.
Tras movilizar al joven a un lugar idóneo y comunicar el hecho al Centro Coordinador de Emergencias (1-1-2), observó como el hombre no respondía a estímulos físicos y/o verbales, y su respiración se tornaba cada vez más lenta. Motivo por el cual se vio obligada a iniciar maniobras de reanimación cardio-pulmonar (RCP) durante veinte minutos aproximadamente, hasta la llegada de los servicios sanitarios, que utilizaron un desfibrilador (D.E.A.), para su completa reanimación.
Posteriormente llegó una ambulancia con soporte vital avanzado, que realizó el traslado del joven al Hospital Universitario de Canarias. Según manifestaron los sanitarios desplazados al lugar la intervención de la policía fue de vital importancia en el mantenimiento de la vida del joven y en mitigar las posibles secuelas que un incidente cardiovascular de estas características puede provocar.